¿Cómo elegir una profesión?

Hay quienes tienen definida la carrera que quieren estudiar y ejercer, prácticamente desde que son conscientes. Des-afortunadamente, no es el caso de todas las personas. También estamos aquellos a quienes se nos dificulta tomar la decisión.

Sabemos que la elección de una carrera es una decisión muy importante. Es una decisión que afectará el resto de nuestras vidas enormemente, por esto es muy natural que tengamos miedo de equivocarnos. O quizá simplemente no tengamos ni idea de por donde comenzar la búsqueda de nuestra vocación. Ya sea que estés por graduarte de la preparatoria, o que haya pasado algún tiempo de eso pero aun no has tomado una decisión sobre la profesión que quieres escoger,…

Cualquiera de estos que sea tu caso, a continuación te presento información al respecto y algunos tips que espero que te sean de ayuda para esclarecer algunas de tus dudas y así tomar esta decisión más fácilmente.

Antes de comenzar, me gustaría dejar claro que éste y todos los otros escritos en la web o demás información al respecto, sólo te podrán servir como guía en la toma de tu decisión. Pero es tú decisión. Nadie más puede o debe tomarla en tu lugar. Es tu vida y tu futuro, eres tú quien va a pasar buena parte de su vida dedicándole tiempo y esfuerzo a esta carrera, así que será mejor que escojas por ti mismo.

 

Comencemos.

La elección de una profesión es un proceso muy personal, y eres tú quien va a decidir cual seguir. Ya sea que decidas dedicarte a lo mismo que tus padres, tus amigos, tu ídolo, lanzar una moneda al aire y dejárselo a la suerte,… o meditar tus opciones y decidir racionalmente, te comparto mi opinión en base a mi experiencia personal.

Hay una gran cantidad de formas en que podríamos hacer esto. Debido a que debemos tomar en cuenta muchos factores, primero debes valorar algunos aspectos. Por ejemplo, ¿cuáles son tus gustos? ¿qué se te da bien hacer? ¿cómo te ves dentro de unos 10 años? ¿en qué Universidad debería estudiar?

Te presento entonces la descripción de cada uno de los puntos anteriormente mencionados:

 

1. ¿Qué te gusta?

Piensa en tus gustos, las cosas que disfrutas… estos son muy importantes para la toma de tu decisión, ya que la profesión que escojas será con la que convivas probablemente el resto de tu vida. Así que para que te resulte más fácil y llevadero, deberá ser algo que te guste, te interese, algo que disfrutes. Por ejemplo, si te gusta ayudar y convivir con las personas, puedes seleccionar alguna carrera en ciencias de la salud, educación, derecho, etcétera. Si te gustan las matemáticas y eres un tanto solitario, tal vez te vayan mejor las ingenierías, arquitectura, las ciencias exactas,… todo depende de ti.

Para orientarte un poco más en cuanto a la carrera que se acerca más a tus intereses, puedes presentar algún test de orientación vocacional. Ya sea en alguna institución que ofrezca exámenes vocacionales, donde te realizarán una serie de pruebas para descubrir tus intereses e inclinaciones. O puedes tomar una prueba en línea. Estas últimas los hay con o sin costo. Por las que pagas, son más completas y por lo tanto exactas. Los que son gratuitas, son mucho más simples y por lo tanto inexactas. Aunque no sale sobrando intentarlo, en el caso de que no
puedas permitirte pagar por una más profesional.

También, si ya tienes la Universidad de tu elección, es posible que ésta cuente con exámenes de orientación vocacional. Puedes buscar si se ofrece la opción de tomar uno, en la página web de la escuela. O contactar con algún asesor del proceso de admisión a la Universidad, y preguntarle si ofrecen esta opción.

Te repito que si tomas uno de estos sería para darte una idea más clara de que carrera se acerca más a tus intereses, pero eres tú quien debe tomar la decisión final. Estos tests son de ayuda para recibir orientación al respecto, pero también se pueden equivocar. Muy probablemente, tú te des cuenta al obtener los resultados, de si la(s) carrera(s) sugerida(s) se acerca(n) a tus intereses o no.

Una vez que conozcas y tengas presentes cuales son tus gustos relacionados a las carreras profesionales que puedes elegir, es hora de tomar en cuenta los otros aspectos.

 

 

2. ¿Cuáles son tus habilidades?

¿Qué se te da bien hacer? ¿Para qué eres bueno? Si bien, estudiar una carrera, ya sea técnica, profesional, o cualquier otro estudio que pienses emprender te va a preparar con conocimientos, habilidades y toda competencia que requieras para dedicarte a ello en el futuro, tú ya debes tener bases al respecto. Por lo regular, los intereses y habilidades se las personas suelen coincidir. Aunque no sucede así en todos los casos. Hay veces en que se nos da bien algo que no nos gusta hacer, o por el contrario, hay ocasiones en que nos llama la atención algo que nunca hemos podido hacer y queremos hacer de ello nuestra profesión porque creemos que ahí está nuestra vocación. En base a esto, te presento la descripción de los 4 escenarios posibles en los que te podrías encontrar:

a) Me apasiona y además se me da bien.

Si tú eres de las personas cuyos intereses y habilidades coinciden, la tienes muy fácil. No hay más que hablar el respecto, este es el camino que debes seguir.

Por otro lado, si difieren tu pasión y habilidades, deberás elegir una carrera que se adapte a cualquiera de los siguientes 3 casos.

b) Me gusta pero no se me da.

Si tus intereses y habilidades se contradicen o sólo no coinciden, debes valorar que es más importante para ti: dedicar tu vida a aquello que disfrutas o a lo que sabes que será fácil para ti aunque no sea lo que quieres.

Te sugiero que en primera instancia te dejes llevar por lo que dicta tu corazón, lo que te apasiona o más disfrutas, lo que quieres para tu futuro. Aunque esta es mi sugerencia, anteponer los intereses a las habilidades, te advierto que si nunca lo has intentado o sabes que no se te da bien, será muy complicado para ti estudiar y luego ejercer una profesión en esos términos. Pero difícil no es lo mismo que imposible. Siempre y cuando seas consciente de esto, si tú decides dedicarte a lo que te gusta aunque no tengas muchas bases en ello, te sentirás satisfecho por dedicarte a algo que disfrutas, aun y cuando no seas el mejor en ello.

c) Aunque no me gusta, soy bueno en ello.

Es válido que decidas tomar el camino «fácil» y hacer lo que sabes, que ya conoces y se te da bien. Aunque a la larga este camino se vuelve el más difícil y pesado porque cuando haces algo que no te gusta, difícilmente resultará placentero a la larga. Aún así, siempre es posible que luego encuentres un trabajo en el que te sientas cómodo y estable, y que eso a ti te sea suficiente para ser feliz. Así que ambos caminos (b y c) son complicados.

d) Medio me gusta y no soy malo haciéndolo.

Hay una tercera opción para quienes distan en sus gustos y habilidades. Pueden escoger algún término medio, en el que aunque no les apasione su carrera, ni sean muy buenos en ella, si les guste y no se les da mal hacer
lo. Es un camino cómodo y lleno de posibilidades. Sólo debes estar dispuesto a sacrificar lo que es este momento te apasiona y lo que se te da bien hacer.

Estos son los 4 escenarios en los que posiblemente te encuentres. Mientras que al primero podríamos llamarlo «ideal», quizá cómo me pasó a mí, no sea tu caso, y tengas que escoger cual de los otros 3 te parece mejor seguir. Está en ti escoger cual tomar. ¿Cuál prefieres?

 

3. ¿Cómo te ves en el futuro?

Escoge una profesión que se adapte a la visión que tienes de ti mismo en el futuro. ¿A qué me refiero con esto? Quiero decir que todos en algún momento u otro hemos tenido alguna visión aunque sea pequeña y lejana de cómo nos gustaría que fueran nuestras vidas en el futuro. Ya sea que te gustaría tener una vida tranquila, casa propia, un carro, una familia,… o que prefieras verte a ti mismo a futuro como un soltero rico y exitoso, con muchos amigos y un departamento en alguna ciudad extranjera, la posibilidad de viajar…

Tal vez tus expectativas no sean tan específicas como los ejemplos anteriores, o quizá vayan más allá. Como sea, todos tenemos sueños, ilusiones, expectativas sobre nuestro propio futuro que esperamos que se vuelva realidad. Al escoger nuestra profesión, tenemos la oportunidad de tomar una decisión que nos va o a acercar a nuestro «yo futuro» deseado, o nos alejaría de él.

Usemos el ejemplo de la persona que quiere una vida tranquila. Esta persona, para ayudarse a conseguir su vida esperada, debería elegir una carrera afín a ello. Digamos, que podría ser maestro si es que así le parece bien, o podría ser contador, informático, investigador científico, etcétera, dependiendo igualmente de sus gustos y habilidades, cómo mencioné anteriormente. Por otro lado, utilizando el ejemplo del soltero exitoso, podría escoger una carrera como relacionista público, asesor legal, médico, etc. Los anteriores solamente son ejemplos. Puede haber una gran cantidad de variantes como ya hemos visto.

En base a las cuestiones anteriores, es posible que te dejes llevar solamente por aquello que te gusta, o lo que se te da bien,… pero lo ideal sería buscar un equilibrio entre todo esto. Es decir, que te sugiero que no escojas algo que únicamente te guste, sino que además se te de bien, y se adapte a la visión que tienes de ti mismo en el futuro. Te sugiero que busques un balance entre las cuestiones anteriores para tomar tu decisión de la forma más consciente posible.

 

4. ¿Cómo escoger una Universidad?

Te sugiero que, además de lo anterior, tomes en cuenta que esté dentro de tu presupuesto costear la Universidad en la que ofrecen la carrera de tu elección.

Este último punto lo considero importante, aunque no tanto como los demás, ya que esto te podrá ayudar a escoger la Universidad en la que estudiarás. Digo que no me parece tan importante como los demás aspectos porque, actualmente, existen muchas formas de poder financiar tus estudios; a través de préstamos, créditos,… Aunque en mi opinión personal, si tienes esa opción, siempre será mejor sólo utilizar el dinero que tienes disponible para gastar, nada más.

Si es posible que se te otorgue algún apoyo económico como beca parcial o total, ¡qué mejor! Si no es así, considera que tarde o temprano pagarás los préstamos y créditos, y que por más optimista que seas ahora sobre tu futuro status económico, no lo conoces con certeza.

Así que considera tus posibilidades económicas a la hora de escoger Universidad para tus estudios de nivel Superior, pero no dejes que este aspecto te limite a no escoger una Institución de tu agrado. Elige cuidadosamente porque cuando busques empleo, casi siempre se toma en cuenta el nombre y la fama de la Universidad en la que hayas estudiado. Por el otro lado, no permitas que esto te presione al grado de escoger un instituto de estudios superiores cuyo costo va más allá de lo que deberías permitirte pagar.

Claro que, hay muchos otros aspectos a tomar en cuenta al momento que seleccionar una Universidad: que ofrezca la carrera de tu preferencia y que cuente con un plan de estudios de tu agrado,  localización, maestros capacitados, que tenga validez oficial de estudios, que te convenzan las instalaciones y servicios,…

Todo esto es vital para la toma de tu decisión. No te apresures a hacerlo. Es preferible que te tomes unos meses extras para asegurarte de qué es lo que en verdad quieres hacer a que te precipites a tomar una decisión y después te arrepientas. Por supuesto, si luego te arrepientes de la decisión que tomaste, siempre es válido cambiar de opinión y modificar el rumbo.

 

Por último…

Te comparto una estrategia que a mi me ayudó mucho para elegir mi profesión: descarte de opciones. No digo que sea el que tú debas utilizar, tal vez a ti te sirva más usar alguna otra forma. Pero fue lo que a mí más me ayudó. Te cuento cómo lo hice.

Antes que nada, yo quería estar segura de la mejor carrera a escoger para mí. Así que, antes que nada yo elaboré una larga lista de todas las carreras que llamaban mi atención, ya fuera porque me parecían interesantes, porque había escuchado que se ganaba bien dedicándose a eso, o por lo que fuera. La lista contenía todas las carreras que me parecían bien. A continuación, investigué minuciosamente acerca de cada una de ellas: de que trataban, perfil de ingreso y egreso, unos cuantos planes de estudios de cada una en distintas Universidades que llamaban mi atención, campo laboral, percepción promedio de ingresos de cada carrera, y otras cosas que a mí me interesaban saber sobre estas profesiones.

Graduation male student have different careers to choose.Luego, comparándolas, fui descartando una a una las que menos me convencían, sea porque no me gustaban tanto, o porque viéndolo de manera realista sabía que no se me daban bien, porque no coincidían con mi visión a futuro de mi vida… y me quedé con algunas cuantas carreras en la lista ahora reducida, así que volví a investigar, ahora sobre las Universidades que ofrecían esas carreras, para así seleccionar una carrera que me convenciera en todos los aspectos: que fuera de mi agrado, según mis habilidades, que me acerque a mis expectativas de la vida que quiero tener a futuro, y que se diera en una escuela en la que quisiera estudiar.

Y funcionó. Finalmente me quedé con la carrera de mi elección, y estoy satisfecha con como han resultado las cosas.

 

Para concluir.

Cómo mencioné en múltiples ocasiones anteriormente, la elección de una carrera es una decisión muy importante pues es una decisión que afectará el resto de nuestras vidas enormemente. El proceso de selección de tu profesión es algo muy personal y sólo tu vas a decidir cual usar. Con el tiempo tú descubrirás cual te funciona mejor.

Recuerda que es tú decisión. Nadie más puede o debe tomarla en tu lugar. Es tu vida y tu futuro. Si aun no sabes por que camino optar, no te desesperes, no te presiones. Llegará el momento en que todo esté más claro y entonces sabrás sin duda que quieres hacer con tu vida. Espero que la información que te he compartido te sea sea de ayuda. Y te deseo mucha suerte en esta búsqueda de tu vocación.

 

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