Mis palabras no dejarán de cumplirse
Las lecturas de este penúltimo domingo del año litúrgico nos hablan de temas escatológicos, eso es, lo que ocurrá cuando llegue el fin del mundo que conocemos.
- Aunque a simple vista parezca lo contrario, se nos comunica un mensaje de esperanza.
- Dios envia en favor de su pueblo a san Miguel arcángel, que en el libro del profeta Daniel se presenta como «el gran príncipe que defiende». Luego de «la gran tribulación», «un tiempo de angustia, como no lo hubo desde el principio del mundo» se salvarán «todos aquellos que están escritos en el libro».
- Cristo volverá glorioso a poner todo en orden: «Verán venir al Hijo del hombre sobre las nubes con un gran poder y majestad»; entonces los enemigos de Dios -todas aquellas fuerzas que se oponen a Él y a su plan de salvación para con la humanidad- finalmente serán «puestos bajo sus pies».
Miremos hacía el futuro con esperanza, confiados en la Palabra de Dios, ya que el triunfo final será suyo.